Este libro refleja la historia de un pibe que nació en Rosario pero maduró en Barcelona. El amor por su tierra quedó grabado en los primeros años de su vida. Sin embargo, debió pagar un alto costo en su país por nunca haber jugado profesionalmente en un equipo de la Argentina y sobre todo, por haberse atrevido a desafiar futbolísticamente hablando, el reinado de Diego Armando Maradona. Humilde, callado, tímido, cero conflictivo, alejado de las polémicas y los flashes, dentro de la cancha posee un diablo interior que lo transforma para muchos en el mejor jugador de todos los tiempos.
Su ambición no tiene límites. A los 26 años ya ganó 4 Balones de oro consecutivos y es el máximo goleador de la historia del Barcelona. Si las lesiones no complican su carrera no dejará registro sin batir. En su vida solo tiene una cuenta pendiente: ser campeón del mundo con la camiseta argentina. Está obsesionado por conseguirlo. Es el único rubro en el que no puede competir con Maradona y Pelé.
Este libro describe cómo este chico de 1,69 metros pasó de ser tildado de pecho frío, amargo, español, catalán, antipatria por no cantar el himno a ídolo de todos los argentinos a poco de jugar el Mundial de Brasil 2014, su gran desafío. Debió sortear todo tipo de batallas hasta ganarse la capitanía y ser el dueño del equipo. Debió vencer a egos de la talla de Riquelme, Maradona y Tévez. Finalmente lo consiguió. Con Alejandro Sabella como DT se le abrió el arco jugando para la Selección, y encontró la felicidad también en su país. Y como dice Guardiola: “si Leo sonríe, todo es más fácil”. Por ejemplo, ganar un Mundial.
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